martes, 10 de mayo de 2011

EL CARNAVAL NO PARA


El grupo social de los transgéneros se caracteriza fuertemente por la union que existe entre sus integrantes. Generalmente, lo que une a estos individuos es el pasado, las experiencias y la lucha diaria contra la discriminacion social con el fin de hacer valer sus derechos de libre expresión. En las últimas décadas, los transgeneros se han sumado a diferentes movimientos del orgullo gay y movimientos feministas, participando activamente en marchas, carnavales y protestas públicas.
Es importante destacar la organización A.T.T.T.A  (Asocioación de Travestis Transexuales Transgéneros de la Argentina) que es reconocida en latinoamerica principalmente por su activa participacion y buen funcionamiento del apoyo que prestan a los integrantes de su comunidad social. 
A continuación presentare un testimonio de uno de los fundadores de esta organizacion, lo que da cuenta de la necesidad del apoyo mutuo que entre los transgéneros:

                       
A.T.T.T.A se formo de un grupo de 15 amigas cansadas de sentir en carne propia el maltrato policial, institucional y social que vivía una TRANS [Travestis, Transexuales, Trangéneros] en Argentina, y el grupo se caracterizaba por ser "rebeldes" a la autoridad como nos tildaban. Estos casos eran a mediados de 1989 donde la policía como burla nos decían ustedes son de la" Asociación de Travestis Argentinas", "que piensan hacer, denunciarnos?", "o salir en televisión a contar todo?" y las burlas se convirtieron en predicciones también cabe destacar que hoy faltan muchas de las compañeras que comenzaron la lucha en A.T.T.T.A.
 Parece increíble que hayan pasado tantos años mirando un poco atrás recuerdo las reuniones donde nos encontrábamos para desahogarnos ya que por ese tiempo no podíamos salir a tomar un café o ir al cine ,tomar un subte ,o el micro por ser detenidas por la policía amparados en edictos. Cuantas veces una estaba en la reunión, salía de la casa y no regresaba hasta el otro día porque la detenían adentro del local, por cosas tan sencillas y cotidianas para otros ,para nosotras era un lujo.
Llegar era una odisea esquivando patrulleros para poder entrar a la casa, esta vida era la cotidiana, sabíamos que estábamos cansadas de vivir así pero no sabíamos para donde arrancar, pero no obstante el grupo se mantenía muy unido nos mandábamos comida y frazadas para la estadía en los fríos calabozos, tengo que aclarar que en Capital Federal eran 24 hs pero en las provincias eran 5, 10 y hasta 30 días, por eso el dilema de algunas chicas sobre que edad tiene A.T.T.T.A.
(testimonio completo disponible en: http://www.attta.org/historia.php)



            

La importancia que tiene esto es la manera en que ellos se abren paso entre las multitudes, con un arte que solo ellos dominan: El impacto social a través de la imagen. Pues existe un mundo en dónde esa destreza es valorada y respetada, donde la sutileza y el talento se premian con aplausos múltiples. La misión de ellos es transportar ese mundo a las calles que transitamos a diario, para que en un futuro cercano pueda traer con sigo el día en que no sea necesario refugiarse en el submundo que han creado y así sentirse libres de salir al exterior sin ser juzgados, discriminados ni menospreciados. La imagen proyectada a través del cuerpo de los travestis es el grito de libertad de una comunidad que ha tenido que abrirse paso entre prejuicios e hipocresía. Sus cuerpos nos entregan un mensaje explícito cuyo objetivo principal es manifestar el goce pleno de sus derechos.
El arte del transformismo juega un rol fundamental en la búsqueda de la aceptación de la diversidad sexual a nivel masivo. No cualquiera posee la habilidad para llevar a cabo esta misión de manera óptima. Debemos aprender a valorar el trabajo que requiere transformar un cuerpo y moldearlo para que el mensaje sea recibido por la sociedad ciega y sorda en la cual vivimos.

“El carnaval  es una pequeña muerte y un renacer simbólico, y eso es esencialmente femenino, pero que no lo provee la mujer sino el hombre, el hombre transformado en fémina” (G, Guillermo).
 Tal vez, algún día, todos podremos formar parte de ese carnaval sediento, dejando a un lado la ignorancia y los prejuicios de los cuales hemos sido víctimas y victimarios desde nuestra llegada al mundo. No basta con decir ¡Déjenlos, es su vida, que hagan lo que quieran!, pues la indiferencia se transforma en un problema aun peor.

                                        


                                      


                                                     /De la película The Rocky horror picture show





lunes, 9 de mayo de 2011

HOY: un heterocosmos sexual

Hoy en día es necesario enfrentarnos a la diversidad sexual. Ya no existen solo dos posturas o comportamientos sexuales (femenino-masculino). El mundo está repleto de nuevas y diferentes propuestas, muchas de ellas no aceptadas abiertamente por la sociedad. En este caso, el pertinente ejemplo es el amplio y potente universo del transformismo, travestismo y transexualidad. Estas clasificaciones poseen particulares diferencias que es importante dejar en claro. 
Aquellas definiciones son tomadas de un estudio sobre los transgéneros, en donde tres individuos, un travesti, un transformista y un transexual se autodefinen bajo su concepción a propósito de su condición sexual (disponible en el link de abajo).

EL TRANSFORMISTA
Es aquel sujeto que en un momento dado y con un propósito determinado, fundamentalmente artístico, se “transforman en el sexo opuesto” mediante el cambio de la apariencia física. En sus propias palabras, “es un gay que en un momento determinado se viste de mujer”, “es de noche nada más, porque todo el mundo no tiene para enfrentar a la sociedad”, “los hay que son artistas”, “quizás son homosexuales que les gusta, por un momento, sentirse mujer”, “hombres que por x motivos se transforman en mujer y luego vuelven a su personalidad”, “modo de canalizar frustraciones artísticas en los homosexuales”, “no es un homosexual que quiera ser mujer, es un homosexual que quiere ser artista a través de un personaje femenino”, “se viste de mujer para su trabajo, vuelve a casa y sigue siendo la misma persona”, “puede que haya el que sí quiere ser mujer, pero lo hace bien”.

                                              


EL TRANSEXUAL
Aquel sujeto que en el existe una identificación genérica hacia el sexo opuesto. Psíquicamente, van a responder a ella y a vivenciar un fuerte rechazo hacia sus órganos sexuales. Su fin será lograr un cambio de sexo a través de la intervención quirúrgica y, con ello, obtener un cambio de identidad jurídica y social. Sólo entonces serán considerados como transexuales por el grupo. “Son los hombres que quieren ser mujer”, “que no les interesa ser hombres”, “es cuando ya te operan”, “hombre que está entránsito de convertirse en mujer”, “las que se atienden en el Fajardo porque se quieren operar y ya tienen tratamientos hormonales”, “el que cambia su sexo, el sexo con el que nació, por el opuesto”, “es un hombre que está operado”, “ya tiene cambio de carnet de identidad”, “es la que anda de mujer todo el día, a todas horas, porque lo siente, porque se siente mujer”, “las transexuales son de La Habana”.

                                           


EL TRAVESTI
bajo esta categoría ubican a las personas que muestran una identificación – más bien conductual – con el sexo femenino. Se visten y comportan como mujeres “todo el tiempo” (insisten en este detalle). En este camino realizan cambios en sus cuerpos mediante la aplicación de hormonas que les producen senos, disminución del vello corporal y otras transformaciones, con el propósito de feminizarlos. No obstante, en general, no muestran interés en realizar un cambio de sexo; por el contrario, esto no parece constituir un conflicto para ellos. “Es el homosexual que no está operado, pero se viste de mujer las 24 horas”, “es la que anda de mujer a todas horas”, “es mujer 24 horas, de día y de noche”, “es todo el tiempo”, “se mantiene las 24 horas con su imagen femenina”, “es la que toma hormonas para una imagen de mujer, pero por dentro es un varón”, “no ha sido intervenido”, “los de la calle, no deben salir nunca si no salen bien hechas”, “son ridículos, les gusta hacer la calle”, “hombres que se travisten detrás de un vestuario para poder ser mujer”. “Entre travestis y transexuales no existe mucha diferencia”, “la diferencia entre ellos es la operación”, “los dos son a toda hora, todo el tiempo”.

                                                    



Desde el punto de vista clínico, las diferentes opciones sexuales relacionadas con la disconformidad con el propio sexo son consideradas como tendencias fetichistas, dentro de la clasificación de trastornos de la identidad sexual:
El trastorno de la identidad sexual puede diferenciarse del comportamiento de disconformidad con el papel del propio sexo por la magnitud y la extensión de los deseos, de los intereses y de las actividades propias del otro sexo… el trastorno representa una profunda alteración del sentido de identidad del individuo con respecto a la masculinización o a la feminización.  (http://files.sld.cu/arteydiscapacidad/files/2009/07/manual-diagnostico-y-estadistico-de-los-trastornos-mentales.pdf )

El individuo, en la mayoría de los casos, comienza a despertar esta inquietud desde la infancia, sintiendo mayor inclinación hacia actividades o intereses más comunes en el sexo opuesto (fundamentalismos y marcas sociales que representan la diferenciación entre masculino y femenino con símbolos como el color azul y el rosado, autos y muñecas, etc.) que más tarde, en la adolescencia y la adultez va adquiriendo un carácter sexual y junto a ello el peso social de lo que significa ser hombre o ser mujer. 

domingo, 8 de mayo de 2011

Transformismo: Arte y lucha



"El transformista conoce muy bien su cuerpo, dedica tiempo al espejo, sabe donde llenar con esponjas, donde hundir o aplanar con huincha scotch, cuantas pantys necesita para esconder los vellos de las piernas, como respingar la nariz, la textura del jabón humedecido para desaparecer las cejas o usar el stick fick, y sabe como “hacerse el truco” para no dañarse los genitales o evitar el bochorno en el escenario".

                                                                   
                                                                          
El arma de las travestis, transformistas y transexuales es el impacto visual. Nunca una travesti actuaría con el fin de pasar desapercibida, menos cuando se actúa en comunidad. Tantas injusticias sociales, laborales y  familiares han hecho que la lucha por la igualdad crezca cada día más. Hoy existen redes de apoyo entre travestis (http://www.attta.org.ar/inicio.htm), pero muchas de ellas todavía sufren maltratos y humillaciones a diario en Chile, Latinoamérica y el mundo entero: “La persecución policial, las acostumbradas restricciones a circular libremente por las calles portando una identidad subversiva, los obstáculos para acceder a los derechos consagrados para todos/as los/as ciudadanos/as del país, entre otros, hacen de la vida travesti una vida en estado de sitio"

Esta situación debiese servir como el primer paso para concientizar a la sociedad y educarla respecto a estos temas cuya relevancia no podemos ignorar. A través del impacto y el desafío que  impone la comunidad transexual mediante sus prácticas, buscan una reacción gratificante y catártica frente al mundo. 

Valoremos la fuerza de quienes luchan a diario por generar cambios en la historia y acabar para siempre con este círculo vicioso  lleno de crueldad e hipocresía. Ellas con su indiscutible talento son capaces de levantarse del piso una y otra vez, retocar el labial cuando sea necesario y continuar la tarea sin descansar, siguiendo con esta lucha en carnavales eternos, fortaleciéndola en cada calle enemiga, en cada espejo cómplice y en cada escenario anónimo.

LOS HIJOS DEL PASADO


Dentro del movimiento transexual, existe una estrecha relación entre el individuo y la identificación con sus pares. Sin caer en generalidades, sabemos de antemano que, en reiteradas ocasiones, lo que une a los travestis es ese doloroso pasado en común, lleno de humillaciones y dificultades que las han hecho fuertes para lograr identificarse y autodefinirse. Esta potencia crece cada vez más, afianzando la lucha por sacar a la luz todo lo que hasta ahora ha sido escasamente visto por los tercos ojos de la heteronormatividad. 

El irreverente y subversivo trabajo artístico de la escritora transexual Naty Menstrual, nos entrega por medio de sus relatos un testimonio importante respecto a esta problemática:

Había caminado las calles de Tucumán con sus primeros tacos, hasta que un día se cruzó con su padre y decidió escaparse a buenos aires, en busca de unas mariconas amigas que le curaron los cientos de moretones que le dejo su básico progenitor que la única psicología que entendía era la de las patadas y los rebencazos. Sería por eso de que a golpes se hacen los machos.
                                                                         

                               http://natymenstrual.blogspot.com/Naty Menstrual.

En sus escritos, la autora nos muestra la relación de los travestis con la prostitución, las enfermedades venéreas, los constantes maltratos por parte de organismos como la policía y la cruda relación que tienen con sus familias. “Todos los putos son producto de una imagen paterna ausente. Entonces, quieres ser como lo que conociste: tu madre. A veces digo: ¡qué horror, soy mi madre! Uno puede cambiar y fluctuar, pero ésa es una marca muy fuerte" ( Revista Debate).

TRANSGÉNEROS: UNA PROBLEMÁTICA SOCIAL







Hoy en día, ni para nosotros, ni mucho menos para una persona transgénero resulta fácil vivir en un mundo de imágenes. Debemos partir desde el reconocimiento del poder que tiene la imagen como medio de comunicación, expresión y transmisión de ideas. Es por esto que por medio de estas palabras me referiré a aquellos travestis, transexuales y transformistas quienes por sus propios medios, han tenido que aprender a utilizar ese poder como la herramienta que, desde sus inicios, les ha permitido afianzar su identidad y ganar un lugar característico dentro de esta sociedad en donde muchas veces no es acptada la fuerza de quienes deben luchar cada día frente a un espejo para ser parte de ella. 
A pesar de que cada vez existen más espacios abiertos a la diversidad, no es fácil ser aceptado públicamente como travesti o transexual. Generalmente se asocian este tipo de prácticas al mundo de la prostitución, la promiscuidad, enfermedades y todo lo que se considera socialmente incorrecto. Esta es la principal razón de los prejuicios por parte de la gente y por supuesto genera gran aversión por parte de un sector importante de la comunidad, lo cual impide, en ocasiones, que las travestis y transexuales se sientan libres para poder actuar abiertamente, fuera del ambiente en el cual se desarrollan normalmente. La sociedad en general aún carece de de tolerancia frente a la diversidad, principalmente por la falta de una educación en base al respeto consiente y honesto hacia lo que nos rodea.